En la restauración hay varias actividades vinculadas con la comida y la bebida, como son los bufets, los banquetes y los caterings, que se llevan a cabo cuando la actividad está destinada a grupos numerosos de comensales.
Preparar la oferta gastronómica, analizar al cliente y lo que necesita y buscar la rentabilidad del menú propuesto u ofertado son actividades primordiales para que el establecimiento y el modelo de negocio sean un éxito.
Por otra parte, y teniendo en cuenta que otra de las partes importantes para que nuestro establecimiento funcione es la atención al cliente, debemos poner en práctica técnicas de comunicación adecuadas y normas de protocolo establecidas que nos permitirán obtener la satisfacción del cliente.